El estilo empieza por conocerse
No todos los cuerpos son iguales, y eso es precisamente lo que hace único tu estilo. La clave para vestir bien no está en copiar lo que ves en redes, sino en entender qué te favorece según tu físico.
Con esta guía aprenderás a sacarte el máximo partido si eres bajo, alto, delgado o corpulento, con consejos fáciles de aplicar y sin complicaciones.
1. Si eres bajo
- Evita: prendas oversize, pantalones muy largos o colores que corten visualmente.
- Elige: prendas entalladas, pantalones tobilleros, monocromía y zapatos sin cortes bruscos.
- Truco: Las rayas verticales alargan visualmente. Usa prendas sin interrupciones en la línea del cuerpo.
2. Si eres alto
- Evita: ropa demasiado ajustada o muy corta que te haga parecer desproporcionado.
- Elige: cortes rectos, capas, tejidos con textura y pantalones con dobladillo.
- Truco: El contraste de color entre partes superior e inferior ayuda a equilibrar.
3. Si eres delgado
- Evita: ropa que acentúe tu delgadez como camisetas ceñidas o pantalones muy skinny.
- Elige: tejidos estructurados, sobrecamisas, estampados y capas.
- Truco: Usa prendas con volumen (cazadoras, suéteres gruesos) para crear proporción.
4. Si eres corpulento
- Evita: ropa demasiado ancha o con estampados grandes.
- Elige: colores oscuros, líneas limpias, prendas de tu talla justa (ni grandes, ni apretadas).
- Truco: El cuello en V y las camisas abiertas estilizan el torso.
Conclusión
No se trata de esconder tu cuerpo, sino de resaltar lo mejor de ti con estilo. Vestir bien no es cuestión de talla o altura, sino de proporción, equilibrio y actitud.
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